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LA LITERATURA ESPAÑOLA DEL SIGLO DE ORO

EL BARROCO LITERARIO EN SU CONTEXTO
CONTEXTO HISTÓRICO-SOCIAL Y CULTURAL DEL BARROCO ESPAÑOL
El Siglo de Oro transcurre a partir del momento de mayor empuje histórico de la España recién surgida como un Estado unificado, a partir de la Reconquista y la unificación de las coronas de Castilla y León, enriquecida con el reciente descubrimiento de “las Indias” y empeñada en la titánica tarea de su colonización; hasta el comienzo de su decadencia.
Unificada bajo el imperio de los Reyes Católicos y regida ulteriormente por soberanos firmemente defensores de la Fé, a partir del surgimiento de la Reforma, España se concentra en la lucha contra el separatismo religioso. Se convierte en paladín de la evangelización del nuevo continente americano, al tiempo que, en su ámbito interno, se mantiene el espíritu de la religión católica tradicional, mediante una censura intensa y rígida; respaldada en la institución de la Inquisición española, llamada “La Santa Hermandad” frecuentemente mencionada en las obras literarias de esta época.
Pero, al mismo tiempo, la situación social interna se caracterizó por la existencia de grandes diferencias entre ricos y pobres. El afianzamiento del sistema monárquico aparejó un fortalecimiento del régimen nobiliario - los “grandes de España” - en tanto que el sistema del mayorazgo expulsaba de su núcleo a los “segundones”, excluídos de la sucesión y librados a la carrera eclesiástica o militar, o a la búsqueda de éxito en la aventura americana.
La expulsión de los moros y los judíos luego de la Reconquista, introdujo también un factor negativo en el orden económico tanto como en el demográfico; que se vio agravado por los efectos de la peste y las hambrunas. Junto a ello, la falsa riqueza producida por el mercantilismo, solventada por los metales preciosos aportados por América, dio lugar al surgimiento de una gran cantidad de menesterosos, marginados de la vida económica, que dieron origen al prototipo social y cultural del “pícaro”.
Poco a poco, el Imperio Español se fue convirtiendo en una potencia de segundo orden; frente al surgimiento de Inglaterra y Francia, que desarrollan sus economías reales y terminan quedándose también con los metales preciosos. España ingresó paulatinamente en una grave crisis política y militar. En particular Francia, aprovechó la creciente debilidad militar española para expandirse sobre los territorios europeos españoles no peninsulares.
La decadencia militar y política del Imperio Español se inició con la derrota de la Armada Invencible(1588), y continuó con la sufrida por su infantería en la batalla de Rocroi, en Francia, el 19 de mayo de 1643, que puso fin a la Guerra de los Treinta Años en la Paz de Westfalia de 1648 y en el Tratado de los Pirineos de 1659; y se prolongó al ingresar el Siglo XVIII, con la Guerra de Sucesión.
En ese contexto, la cultura barroca resulta ser en buena medida reflejo de esas circunstancias conformadas por la decadencia, la crisis, el malestar social, las tensiones religiosas y una resultante común de frustración y desengaño. Se asiste al derrumbe del idealismo renacentista, con su amor a la vida y su visión armónica del mundo; y se impone una concepción negativa del mundo y de la vida.